Cámaras de vigilancia: otra opción para tu seguridad

Una de nuestras principales preocupaciones es mantener a salvo a nuestra familia, así como impedir robos e intrusiones en nuestros hogares cuando no estamos presentes. Como comentamos en la anterior entrada,  las alarmas para casa pueden cumplir perfectamente esta función protectora a través de su acción disuasoria.

Pero también podemos encontrar otros sistemas de seguridad si queremos una opción alternativa u otros mecanismos para complementar una alarma.

En esta entrada nos ocuparemos de forma introductoria del uso de cámaras de vigilancia en toda su extensión. Se puede optar por sistemas con rotación o fijos, dependiendo de la zona de nuestra residencia (nos limitaremos exclusivamente a vigilar nuestra propiedad ya que dependiendo de cada país, las normas en cuanto a estos sistemas y el tener una cámara apuntando a lugares públicos, como la calle, varían).

Aunque próximamente entraremos en detalles, podemos adelantar que en un primer momento podemos distinguir entre  cámaras analógicas y cámaras IP.  Contaremos con un monitor específico para visualizar las imágenes en tiempo real o a través de grabaciones, aunque ya es perfectamente posible poder seguir este control desde nuestro propio ordenador o dispositivos móviles. En muchas ocasiones, este sistema de vigilancia suele ser utilizado en negocios o propiedades con una extensión considerable, estaríamos hablando de  un sistema CCTV, algo más complejo por contar con varias unidades vigilando.

En los casos en que la vigilancia vaya a estar situada en el exterior nos aseguramos de que estará preparado para ello en cuanto a su capacidad para resistir las condiciones climáticas adversas a las que van a estar sometidos, al igual que sucede con las alarmas para casa.

También debemos elegir una posición óptima y si queremos que algunas de las cámaras sean visibles o no. El que sea visible, como ya hemos comentado en la primera de vuestras entradas, tendrá un gran poder de disuasión. En este caso, dentro de lo posible, se colocara en lugares de difícil acceso. Pero por supuesto todo dependerá de nuestras necesidades en concreto. Si se trata de una gran empresa con un extenso recinto exterior  o varias naves y hay operarios de seguridad, en muchas ocasiones el sistema estará oculto al contar con vigilancia humana constante.

También hay que considerar las condiciones lumínicas del espacio de nuestra elección, una vez más, no es lo mismo un lugar cerrado que otro exterior.

Por tanto, dependiendo del uso concreto y de la localización, tendremos que elegir el mejor tipo de cámara de vigilancia. Próximamente profundizaremos en los distintos tipos: IP, inalámbricas, infrarrojas, con grabación de audio, camufladas…

Así,explicaremos los principales tipos y las características más importantes que hay que tener en cuenta para que nuestra decisión sea la óptima según nuestros intereses.